Enrócate
No eres evidente, correr lo es demasiado…
Enrócate en tu castillo,
con miretes y murallas,
hazlo si te parece,
en tus torres y alcazabas.
Enrócate con un guiño
cuando la vida te espanta,
y la respuesta te falte,
cuando no sepas huir.
Enrócate sin sedarme,
cuando yo esté delante,
en cuanto me creas peligro
y te enfrentes a sentir.
Enrócate si tu quieres,
Y mi aire herirá menos,
mi lluvia no agrietará tus dedos,
mi sol no abrasará por dentro,
mi granizo no entrará en tu pecho.
Enrócate para no verme,
o para hacerlo de lejos
y todo, hazlo a sabiendas,
no se enredar ese juego,
ya que mi vida no sigue
las reglas de tu tablero.
Erica (28/01/2019)