Marte ya no es rojo
Nacido su pelo
de arena rojiza,
del Dios de la Guerra
el hijo no fue,
contando planetas
mientras se dormía,
fugaces sus sueños
le hacían volver.
Instantes de lucidez... Todo lo que hay en este blog está escrito por mí, sin más, soy yo en diferentes momentos de mi vida, permitiéndome acercarme a mi misma, verme de algún modo... si algo de todo esto reconforta, o remueve, o genera cualquier emoción... ya es más que suficiente.