Vuelve a mi
Yo
aquí, siempre aquí, no puedo decirte nada, no quiero hacerlo, estoy aquí para
ti y además quiero estarlo.
Estoy
aquí para que llores, para que rías, para que sientas, para que grites y tus
palabras bailen en mi y juegues con mi pasividad y sientas calor cuando
hace frío y me ames; porqué yo te amo, porqué vivo de tus
palabras, sueño con ellas cuando no las escribes y me hastía que los demás me
malgasten y me echen a perder, mientras me descuido añorándote.
Cuando
no escribes, cuando tardas en llenarme de ti, sufro y me siento abandonado pero
no paro de pensar en tu vuelta, en tus líneas, eso me mantiene aquí para ti,
para mí…
Siento
envidia de aquello que te entretiene, de aquello que impide, de algún modo, que
vuelvas a mi, a refugiarte en esa aridez, la de mi cuerpo impoluto que
consigues llenar con riqueza, sensualidad y amor ilimitado.
Yo
sé que a veces intentas olvidarme, y es que no todo es amor y pasión en mí,
también muestro tu tristeza, tu miedo y tu dolor, todo lo que existe en
ti. Y aún así, sé que siempre vas a volver.
Lo
recuerdo, lo sé, no me olvidarás, un día te prometiste a ti misma serme fiel, y
tú no faltas a tus promesas.